Equipo Buddies: Pipa, la investigadora
Pipa es un ejemplo de superación . Esta mestiza de dos años y medio fue capaz de transformar la crueldad y el abandono sufrido por amor y protección . Su actitud quizás es una forma de gratitud hacia Maribel Vila, responsable de terapias de la Fundación Affinity, que la adoptó hace casi dos años tras haber sido encontrada en un contenedor de basura en Tarragona. "Fui a conocerla a la protectora y nada más verla me enamoré de ella por su expresividad y sus ganas de estar con humanos. Pesa siete kilos y medio y es muy vivaracha, juguetona, activa, alegre, pero sobre todo cariñosa" .
Desde su nuevo hogar y para desenredarle el pelo, que estaba muy enmarañado, Pipa fue llevada a la peluquería. Allí descubrieron que todo lo que ella ofrecía no fue advertido a primera vista, oculta por su castigado pelaje surgió u na barriga sospechosa. Pipa venía con sorpresas, seis cachorritos que nacieron una madrugada cuando aún no se había cumplido una semana de su adopción. "El primero lo tuvo ella sola, pero los cinco restantes la ayudamos, ya que nos despertó los gemidos del primer cachorrito. Creo que este hecho, ayudarla en el parto, nos hizo crear un vínculo todavía más fuerte con ella", comenta Maribel.
Pipa fue una estupenda mamá, protectora y educadora, vigiló y enseñó constantemente a sus cachorros pero también se dejó ayudar por su familia adoptiva. Todos los cachorros encontraron familias, que tuvieron que pasar un "screaning", y viven muy felices. El cachorrito más pequeño, Pipita, que fue el primero que nació y necesitó más cuidados, fue adoptado por una amiga de Maribel que vive en Portugal y a la que visita a menudo. Cada vez que se reencuentran, la alegría y los "festejos" son expresiones exageradas y recíprocas entre Pipita y Maribel.
Tres meses después del parto, Pipa comenzó su adiestramiento como perra de terapia. En la actualidad es una excelente trabajadora, le encanta investigar y es capaz de generar mucha empatía por su historia de vida. El abandono y las circunstancias en que la encontraron no le han impedido ser la más feliz y juguetona del equipo. Pipa es la mimada del grupo, ella se lo ha ganado con su aporte de felicidad a la vida de los que la rodean y viviendo su presente de manera muy intensa.