¿Por qué los animales tienen derechos?

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"Todos los animales nacen iguales ante la vida y tienen los mismos derechos a la existencia. El hombre, en tanto que especie animal, no puede atribuirse el derecho a exterminar a los otros animales o explotarlos violando su derecho”. Así inicia la Declaración Universal de los derechos de los animales aprobada por la ONU.

¿Por qué los animales han empezado a considerarse sujetos de derecho?

Desde la aprobación, en los años 70, de la Declaración Universal de los derechos de los animales, se han empezado a generar una serie de acuerdos internacionales en los que se considera que los animales tienen que ser un sujeto de derecho. Pero ¿qué significa ser un sujeto de derecho? Significa que, al igual que los humanos, los animales tienen derechos que deben ser respetados, como el derecho a la libertad, a que no se les cause dolor, a la satisfacción de sus necesidades básicas y la preservación de su hábitat.

Todos los animales nacen iguales ante la vida y tienen los mismos derechos a la existencia. El hombre, en tanto que especie animal, no puede atribuirse el derecho a exterminar a los otros animales o explotarlos violando su derecho.

Anteriormente, se consideraba que los animales no tenían consciencia ni sensibilidad y que eran incapaces de sentir emociones pero esta idea en los últimos años ha cambiado. Por ejemplo, la Unión Europea, el año 2009, realizó una modificación en su Tratado de Funcionamiento para reconocer a todos los animales como seres sensibles y, en el año 2012, un grupo de neurocientíficos respaldó esta postura mediante la Declaración sobre la conciencia de Cambridge en la que se aseguraba que los animales son conscientes y tienen capacidad de sufrir. Esto los convierte en merecedores del derecho a la vida sin sufrimiento innecesario.

Este reconocimiento en Europa ha obligado a los Estados miembro a formular nuevas políticas orientadas a garantizar una mayor protección y un mayor respeto del bienestar de los animales. Cada país, desde ese entonces, ha empezado a aprobar sus propias leyes orientadas a la protección y el bienestar de los animales.

Los países europeos como Austria, Alemania y Suiza han ido adaptando su normatividad y formularon leyes especiales de protección de los animales como seres dotados de conciencia e inteligencia. Posteriormente, en el año 2015 se unió Francia, que ya consideraba a los animales como seres sensibles en su Código Rural, y declaró explícitamente en su Código Civil que los animales son seres dotados de sensibilidad. El país que más recientemente se ha adherido a esta modificación del Código Civil ha sido Portugal, en el año 2017, y logró retirar del estatuto jurídico de “cosas” a los animales.

La importancia de este movimiento impulsado por Europa se ha visto reflejado también a nivel mundial, ya que países como Canadá, Nueva Zelanda y Colombia también se han adherido a esta iniciativa de cambiar el estatus de los animales y otros países como Brasil y Argentina han iniciado los trámites legales para conseguirlo.

Sin embargo, la legislación española está muy lejos de las políticas adoptadas por otros países de la comunidad europea, ya que en pleno siglo XXI sigue considerando a los animales como cosas. Está en la mesa del Congreso de los diputados la Reforma del Código Civil español: #AnimalesNOsonCosas, impulsada por la Fundación Affinity y el Observatorio Justicia y Defensa Animal por lo que esperamos que este cambio en la legislación se haga efectivo cuanto antes y que los animales, en lugar de cosas, sean considerados seres vivos dotados de sensibilidad.